El pasado 22 de noviembre, un equipo de bahianos partía hacia Barcelona para disfrutar de la décima edición de CAS.
Levantarse a las 5 A.M para salir al aeropuerto no es cosa menor, como diría un conocido político, sobre todo teniendo en cuenta que estaba cayendo el mismísimo diluvio universal. Pero, a pesar del tiempo, disfrutaron de un vuelo tranquilo.
A su llegada al aeropuerto, conocieron a un curioso taxista, muy interesado en el tiempo gallego en general y en los informáticos en particular (si…aunque parezca increíble… ¡no todos los informáticos son aficionados a los doritos como este taxista pensaba!).
En el Palacio de Congresos les esperaba una cola de entre 30/40 minutos, pero, pasada la tempestad, pudieron disfrutar de un enriquecedor evento en el que conocieron e intercambiaron ideas y diferentes puntos de vista con otros profesionales partícipes de la comunidad agile.
Sin duda, ha sido una gran experiencia disfrutar de ponentes como: Jeff Gothelf, Julie Diamond, Pia-María Thorén, Dan North…entre muchos otros.
A destacar, la heterogeneidad y cantidad de charlas y workshops: algunas muy enfocadas hacia la parte de gestión y la psicología de los equipos y otras más técnicas, pero todas ellas siguiendo un objetivo muy claro y conciso: fomentar el desarrollo de software ágil y sostenible.
De la misma forma, cabe destacar el valor diferencial en el que se centró el evento en este 2019: visibilizar el cómo la comunidad agile contribuye al crecimiento personal dentro del entorno profesional.
En resumen, tal y como nos han contado nuestros compañeros, esta experiencia les ha servido para profundizar en su conocimiento sobre agilidad y también para crear vínculos con otros profesionales de la comunidad y afianzar el sentimiento de equipo entre ellos mismos.